Niños víctimas de matoneo tendrían mayor riesgo de desarrollar parasomnias

Investigadores de la University of Warwick, Reino Unido, publicaron un artículo en la revista Pediatrics en el que analizan los efectos emocionales y secuelas que desarrollan los niños víctimas de matoneo, destacando los terrores nocturnos y sonambulismo como principales consecuencias.

Para llevar a cabo su análisis, los investigadores reclutaron un total de 6.796 niños con edades entre los 8 y los 10 años, que participaban simultáneamente en el estudio Avon Longitudinal Study of Parents and Children (ALSPAC). Todos los infantes fueron interrogados acerca de sus experiencias personales de matoneo en la escuela. Posteriormente, fueron seguidos hasta la edad de 12 años, cuando fueron entrevistados por psicólogos especializados en la detección de parasomnias y otros trastornos del sueño.

Luego de tabular y comparar los resultados, se logró determinar que la población pediátrica que fue matoneada entre los 8 y los 10 años de edad, fue la más susceptible de presentar sonambulismo, terrores nocturnos, pesadillas, trastornos de ansiedad, cuadros depresivos y estrés crónico luego de cumplir los 12 años. Se documentó también un fuerte impacto sobre la autoestima y autoconcepto de estos niños.

Por otra parte, se determinó que los perpetradores del matoneo no desarrollaron consecuencias psicológicas durante el periodo de seguimiento. La Dra Suzet Tanya Lereya, líder del equipo investigador, concluyó: “ser matoneado trae consigo secuelas muy estresantes para los niños, que a mediano y largo plazo presentan complicaciones psicológicas y fisiológicas (…) Cuando la ansiedad excede un umbral determinado, los menores acusan pesadillas y otras parasomnias. Esto hace fundamental detectar oportunamente los casos, en aras de buscar asesoría profesional oportuna y evitar la progresión de las lesiones emocionales”.