El sector de Dispositivos Médicos (DM) en México cada vez repunta más gracias al desempeño exitoso de actividades de manufactura y ensamble, indispensable para que el país se consolide en el quinto lugar como exportador de DM a nivel mundial, segundo a nivel de Latinoamérica y como el proveedor más importante para el mercado de los Estados Unidos.
Suena muy alentador referirse a números en los que se vislumbra un crecimiento del sector. Por ejemplo, Pro México estima que entre el 2012 y el 2020 la producción mundial de DM aumentará 7,6% anual, mientras que el consumo tendrá una tasa de crecimiento de 7,9%, y alcanzará un valor de 1.200 miles de millones de dólares (mmd). Para el caso nacional, en el 2012 la producción generó 10.598 mdd, y se espera que para el 2020 el monto ascienda a 19.039 mdd. Por otro lado, en ese año se exportaron 6.343 mdd e importaron 3.188 mdd, con un beneficio de 3.155 mdd.
Pero a pesar de las positivas estadísticas, México no se ha caracterizado por la producción y comercialización de DM avanzados e innovadores, sino por el contrario, el tipo de productos que oferta caen en el rubro de tecnologías simples o convencionales.
Se puede decir que el país se encuentra en los primeros lugares de manufactura y ensamble por dos motivos principales: el costo de la mano de obra y los de traslado o exportación, que se reducen por cuestiones de la cercanía geográfica con su principal consumidor (Estados Unidos). Sin embargo, algunas de las problemáticas a las que se enfrentan las empresas al intentar comercializar DM implican cumplir con una serie de regulaciones y normatividad nacional e internacional, que para el caso de desarrollos simples es más fácil cubrir en comparación con tecnología avanzada.
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Por tal motivo, es importante analizar y cuestionar el desempeño de los factores del entorno mexicano que propician la producción y comercialización de dichas tecnologías, que por ende pueden llegar a ser innovaciones en el sector. En ese sentido, la ubicación geográfica, el grado de especialización del conglomerado de empresas del sector (ubicadas en diversos estados del país), los incentivos para el desarrollo tecnológico, la cobertura de protección de la propiedad intelectual, las disposiciones de regulación sanitaria, el marco institucional, la mano de obra calificada, la demanda y el tipo de padecimientos de la población, entre otros, son los factores que tienen un efecto directo en las acciones relacionadas con el mercado.
El análisis de los aspectos mencionados permite identificar áreas de oportunidad en la generación de opciones novedosas de tratamiento y diagnóstico de enfermedades prevalecientes en la población o de incidencia en aumento. También suele ser una herramienta que coadyuva en la evaluación antes y durante el desarrollo de la invención, utilizada con la finalidad de reducir el grado de incertidumbre que implica para los actores involucrados (centros de investigación, empresas, emprendedores, investigadores, instituciones de salud, etc).
El avance tecnológico de DM se caracteriza por el trabajo multidisciplinario de diversos campos del conocimiento en vinculación con instancias gubernamentales y el sector industrial, que tiene la finalidad de completar dicho proceso a través de la obtención de beneficio económico como resultado del lanzamiento y aceptación de la tecnología. En la actualidad en México existen apoyos y financiamientos favorecedores de este propósito, pero ¿qué tanto le alcanza esa iniciativa a la nación para lograr las metas de progresión esperadas? El proceso comercial como resultado de desarrollar un DM viable y factible, necesita de un trabajo arduo, pues es una etapa que requiere de altas inversiones, no necesariamente financiadas por el gobierno, pues se requiere del aporte sustancial de los interesados en el proyecto.
Ahora bien, si se considera que de 60 ideas, 2 se comercializan y de éstas sólo una llega a denominarse como exitosa en el mercado, es decir puede llegar a ser una innovación -que en el caso del contexto nacional suele ser una mejora de los dispositivos ya existentes en el mercado-, se puede decir que en cuestión de desarrollo tecnológico y en consecuencia de la comercialización, aún falta mucho por realizar, ya que el número de invenciones disponibles es poco.
La comercialización de los DM es entonces un tema de relevancia para la industria no solo nacional sino internacional, que permite evaluar las oportunidades de crecimiento y las limitaciones tanto de las empresas (proveedoras de tecnología) como del sector (capacidades de asimilación), pero que también implica contar con ciertas habilidades comerciales para plantear las estrategias correspondientes con el objetivo de traspasar las barreras de entrada a tal segmento.