Tratamiento de escoliosis con barras espinales magnéticas promete ser útil también en adultos

Una mujer con diagnóstico de escoliosis en ‘C’ se convirtió en el primer paciente adulto en ser tratado con barras espinales magnéticas. El procedimiento fue llevado a cabo en el Hospital Tallaght en Dublín, Irlanda, el año pasado.

La tecnología utilizada por los médicos se conoce como Sistema de Control de Expansión Magnética para soporte y distracción espinal. Se trata de una o dos barras espinales implantables de titanio con una porción de imán, que son fijadas mediante cirugía en la columna vertebral, tal como las barras espinales convencionales.

Con el fin de corregir la curvatura de la columna vertebral, su distracción es controlada de manera externa en modo no invasivo con un sistema magnético capaz de modificar la longitud de las barras sin necesidad de hospitalización, anestesia, sedación ni medicamentos para el control del dolor.

El sistema se ha usado en niños con escoliosis con edades entre 2 y 10 años que necesitan cirugía para la corrección de la curvatura de columna vertebral. La necesidad de un solo procedimiento quirúrgico -en lugar de varios para el alargamiento de las barras espinales- constituye su principal ventaja.