Eficiencia quirúrgica apoyada en salas híbridas

A diferencia del quirófano convencional, uno híbrido combina la posibilidad de hacer cirugías capturando en tiempo real imágenes que son útiles para el diagnóstico inmediato y mejor la toma de decisiones clínicas durante el proceso.

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Tener un complejo quirúrgico equipado con  dispositivos avanzados de imágenes diagnósticas, permite realizar cirugías de alta complejidad de forma más sencilla, rápida y menos invasiva. A su vez, garantiza mayor seguridad para el paciente y los profesionales médicos.

Expertos de México, Colombia y España que trabajan con sistemas de cirugía robótica, y diferentes tecnologías de alta complejidad, aseguran que estas modernas salas de operación contribuyen al mejor cuidado de los pacientes y el uso óptimo de los espacios, reuniendo todas las condiciones de asepsia y las características de equipamiento de una sala de cirugía avanzada.

La construcción de salas inteligentes no exige una normatividad específica o técnica, pero existe una serie de preceptos que regulan las condiciones de construcción de estos espacios como el reforzamiento estructural. A su vez, se requiere de algunas clausulas técnicas de infraestructura que establece el peso ideal de los equipos y regula la protección de los pacientes y los médicos en lo referente a la emisión de radiación.

CARACTERÍSTICAS E INFRAESTRUCTURA

Hace más de diez años, México cuenta con salas de operación híbridas en instituciones médicas como el Hospital General de México y Hospitales Puerta de Hierro.

Paulina Padilla, médica cirujana del Instituto Mexicano de Seguridad Social, asegura que estos espacios deben contar con una serie de equipos altamente funcionales y especializados que permitan satisfacer las necesidades del personal de quirófano y de los pacientes.

"Los tipos de procedimientos que se realizan con más frecuencia las salas híbridos de México son trasplantes, cirugías endovasculares, de corazón, cráneo, hígado-páncreas, del aparato digestivo y neurocirugías", comenta la cirujana Padilla.

En materia de financiación, el costo para crear una sala de cirugía híbrida oscila ente MNX 30 y 40 millones (alrededor de USD 1.4 a 1.9 millones); Por otro lado se debe contemplar el costo que representa el mantenimiento de las piezas que las conforman y la capacitación que debe realizarse a las personas que hacen la limpieza de estas salas.

PLANEACIÓN ADECUADA: LA CLAVE PARA EL ÉXITO DE UNA SALA HÍBRIDA

Los hospitales que implementan quirófanos híbridos, ofrecen a sus pacientes un amplio portafolio de servicios que responde a las necesidades quirúrgicas con resolutividad. A su vez, garantiza menos incisiones, lo que genera mayores posibilidades de éxito en intervenciones cardiacas, oncológicas y vasculares, entre otras.

A diferencia de quirófano convencional, un espacio híbrido combina la posibilidad de hacer una cirugía capturando en tiempo real imágenes que son útiles para el diagnóstico inmediato y mejor toma de decisiones clínicas durante el proceso.

De acuerdo con Héctor Mario Mejía, fundador y presidente de Hospital Desingn & Quality, el éxito de un proyecto para crear una sala de cirugía híbrida, depende principalmente de la planeación.  "Al realizar una adecuada metodología del proyecto y entender el modelo de negocio de estos innovadores centros de operación, se puede estipular el retorno de la inversión".

Según el especialista en Gerencia de la Calidad y Auditoría en Servicios de Salud, el costo de los proyectos de quirófanos híbridos es relativo, pues depende de su localización, el equipo diagnóstico que se vaya a implementar y el entrenamiento del personal designado para trabajar en estos espacios. Por otra parte, cuando se trata de proyectos de adaptación o remodelación, debe tenerse en cuenta las redes eléctricas, el cableado estructurado, las instalaciones hidrosanitarias y la actualización de los sistemas de información.

Para el Gerente Mejía, "es indispensable poner en funcionamiento los quirófanos híbridos en hospitales de alta complejidad e instituciones que presten servicios de cirugía cardiovascular, neurología y neurocirugía, clínicas de manejo del dolor y tratamiento de cáncer". De esta forma aumenta la resolutividad en el tratamiento de personas diagnosticadas con alguna de las patologías mencionadas.

EL FUTURO DE LAS CIRUGÍAS VASCULARES MENOS INVASIVAS

Con la implementación de salas de cirugía híbridas, España ha pasado de hacer la mayoría de intervenciones abiertas a realizarlas guiadas por catéteres. Cerca del 90% de las patologías aórticas ejecutadas en los hospitales ahora son tratadas a través de cirugías de mínima invasión, mediante cierres percutáneos. En el campo de la cirugía vascular se usan principalmente para tratar la dilatación de aorta, y neurorradiología,  principalmente en el tratamiento no invasivo de los aneurismas cerebrales.

Los quirófanos híbridos son la evolución natural de la tecnología en el ámbito de la cirugía vascular. De acuerdo con el doctor César Aparicio, jefe del Servicio de Angiología y Cirugía Vascular del Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz, "los procedimientos más susceptibles de practicarse en estas salas son las cirugías vasculares, donde se puede realizar una combinación de operación abierta y endovascular, o procedimientos más complejos como aneurismas abdominales y toracoabdominales, y disecciones aórticas, entre otras, con control quirúrgico y anestésico optimo".

Por su parte, el doctor José Ángel Cabrera, jefe del servicio de Cardiología del Hospital Universitario Quirónsalud de Madrid, señaló que en cardiología intervencionista los quirófanos híbridos se utilizan para la implantación de marcapasos, terapias de resincronización cardiaca en pacientes que han sufrido un infarto, implante de desfibriladores percutáneos, tratamiento de arritmias, cierre de lesiones en el corazón, implante de válvulas cardiacas, colocación de stents, tratamientos de aneurismas cerebrales e ictus.