Nueva opción de tratamiento ambulatorio para enfermedades cardíacas isquémicas, Terapia EECP

La terapia de contrapulsación externa sincronizada EECP de Vasomedical es una opción de tratamiento ambulatorio no invasivo, seguro, económico y efectivo para los pacientes que presentan enfermedades cardíacas isquémicas tales como angina de pecho e insuficiencia cardíaca. Los estudios clínicos demuestran que más del 75% de los pacientes se benefician de esta terapia con una mejoría sostenida hasta tres años después del tratamiento.

Los tratamientos se llevan a cabo durante una hora cada día, cinco días a la semana, para un total de 35 horas. El paciente se acuesta en una mesa cómoda y se le colocan alrededor de las piernas y la región glútea bandas inflables grandes, similares a los brazaletes que se usan para la toma de tensión, las cuales se inflan y desinflan en momentos específicos del ciclo cardíaco. La sincronización se configura mediante un electrocardiograma continuo, de modo que las bandas se inflen secuencialmente durante la diástole, primero en la zona de las pantorrillas, luego en las caderas y posteriormente en la región glútea, con fin de incrementar el suministro de sangre y oxígeno al músculo cardíaco; y que después de este período, inmediatamente antes del siguiente latido, se desinflen para reducir el esfuerzo del corazón. A medida que las bandas se inflan y desinflan, el paciente las siente cada vez más apretadas hasta que se alcanza la presión máxima de tratamiento. Un sensor colocado en el dedo del paciente verifica el nivel de oxígeno en la sangre y monitorea las ondas de presión creadas por las inflaciones y deflaciones de los brazaletes.

La evidencia demuestra que gracias a los efectos hemodinámicos de la tensión de cizallamiento, la cual libera factores angiogénicos y actúa sobre la pared de las arterias proporcionando efectos protectores contra la inflamación, se produce una mejoría de la función endotelial con aumento de la concentración de ácido nítrico, disminución de los niveles de endotelina, y una reducción de la rigidez arterial, de la hiperplasia de la íntima y del proceso ateroesclerótico. Además, esta terapia desencadena una respuesta hormonal que induce la producción de factores de crecimiento y vasodilatación y junto con el gradiente de presión creado en el sitio de oclusión, promueve la revascularización y aumenta el flujo coronario colateral, la fracción de eyección y la clase funcional. También se produce una desactivación neurohormonal con disminución de las citoquinas proinflamatorias, y una regulación del tono muscular. Todo esto hace que los pacientes adquieran una mayor capacidad de ejercicio, necesiten menos medicamentos, y logren mejorar su calidad de vida.