Prueban con éxito un páncreas artificial

Investigadores de las Universidades de Minnesota y Colorado, en Estados Unidos, desarrollaron un páncreas artificial para el control de la glucemia en pacientes con pancreatitis sometidos a pancreatectomía total seguida de trasplante autólogo de islotes pancreáticos.

El órgano artificial consiste en la combinación de una bomba de insulina y un monitor continuo de glucosa dentro de un circuito cerrado, cuyo objetivo es reducir al mínimo la hiperglucemia, la cual se asocia a la apoptosis de las células beta de los islotes pancreáticos trasplantados.

En el estudio¹, publicado en el American Journal of Transplantation, a siete individuos se les asignó el tratamiento con el nuevo dispositivo, y otros siete recibieron múltiples inyecciones de insulina al día mientras se mantenía la monitorización continua de la glucemia a ciego. Los niveles de glucosa en sangre resultaron ser significativamente menores en el grupo que utilizó el dispositivo experimental y, además, no presentaron riesgo incrementado de hipoglicemia.

El doctor Gregory Forlenza, autor principal del análisis, afirmó que "el uso del páncreas artificial mecánico tras el trasplante de islotes puede ayudar a las células trasplantadas a sobrevivir y a producir más insulina durante más tiempo". Forlenza agregó que espera que en el futuro esta tecnología beneficie también a los pacientes con diabetes.