Inteligencia artificial, chatbots y datos web, la digitalización de la medicina en MEDICA 2017

La más reciente edición de la feria MEDICA, que se realizó del 13 al 16 de noviembre en Dí¼sseldorf, Alemania, ofreció a sus visitantes una perspectiva interesante sobre los temas y las tendencias que van a dar forma a la revolución digital en el sector de la salud con una amplia gama de opciones.

"Si escribe Izzyperiod en el cuadro de búsqueda de Facebook, esto es lo que va a aparecer en su pantalla: "Izzy es tu amiga. Ella te entiende y te ayuda a estar preparada al hacer un seguimiento de tu ciclo menstrual", dijo el doctor Hajnalka Hejja, médico, fundador y director ejecutivo de la compañí­a alemana Smart Health UG aka MediLad. Si Izzy fuera una persona, esto no serí­a algo fuera de lo común, pero Izzy es un chatbot. Los sistemas basados en texto como estos, en los que cualquier persona puede tener una conversación natural en lí­nea, están en auge a nivel mundial, además se cree que tienen potencial de desarrollo masivo en el sistema de salud.

Este programa informático diseñado para simular conversaciones, presenta una voz amistosa para las mujeres jóvenes que quieren aprender más acerca de la salud reproductiva. La aplicación primaria de Izzy es predecir la menstruación y la ovulación. La diferencia entre este chatbot y otras aplicaciones es que Izzy no requiere la instalación de una aplicación o software, la interacción tiene lugar en forma de una conversación entre el usuario y el chatbot femenino (a través de Facebook Messenger), pocos datos necesitan ser introducidos para determinar el ciclo menstrual con suficiente precisión, señala MEDICA.

Hasta ahora, mujeres jóvenes de Estados Unidos y Gran Bretaña, y algunas alemanas, han sido las principales usuarias de este servicio. El servicio chatbot está dirigido a todas las mujeres que crecieron en entornos sociales donde discutir aspectos del embarazo era difí­cil o imposible. Izzy es libre de uso, pero servicios como estos también requieren que el financiamiento esté asegurado; por esta razón, el doctor Hejja señala que Alemania serí­a un buen lugar para establecer aplicaciones de alta calidad en el sistema de salud.

"El plan es desarrollar servicios especí­ficos con empresas cuyo grupo objetivo sea femenino. En la actualidad estamos buscando socios en esta área", expresó Hejja al portal MEDICA. Izzy quiere continuar su desarrollo, convirtiéndose en un mercado para productos de salud femeninos. Hay numerosas aseguradoras privadas y proveedores de servicios privados que estarí­an dispuestos a pagar por estas innovadoras formas de información y comunicación.

Estos son servicios en la lí­nea de la digitalización de la medicina y el empoderamiento de los pacientes a partir de la puesta en práctica de la información tecnológica en la medicina de precisión. Erwin Bí¶ttinger, investigador, profesor y Jefe del Centro de Salud Digital en el Instituto Hasso-Plattnerm, en Alemania, explicó a MEDICA que el objetivo de su trabajo en la institución es desarrollar una nube de salud, una plataforma de datos controlada por el paciente, accesible desde cualquier lugar, que capacite a los usuarios y apoye a las instituciones, así­ como al personal sanitario, en el manejo de enfermedades crónicas y el cuidado de la salud.

Los datos de estudios clí­nicos estarí­an disponibles así­ como la información del paciente. Un algoritmo reúne ambos conjuntos de datos y los utiliza para calcular si la persona es elegible para participar en un estudio y en cuál. Los pacientes y los médicos pueden beneficiarse de la investigación, también la ciencia. "Querí­amos que esto se aplicara con un alcance lo más amplio posible", expresó Bí¶ttinger.

El factor principal para que la propuesta sea exitosa es tener socios regionales de las diversas áreas que quieran desarrollar soluciones en conjunto. La organización del sistema de salud alemán plantea desafí­os a todas las partes interesadas, esto se debe a que la transferencia de datos entre sectores es difí­cil en el paí­s europeo.

Bí¶ttinger pudo poner en práctica la investigación médica en el sistema de salud Mount Sinai, de Nueva York, Estados Unidos. "Tenemos un programa transnacional para implementar la farmacogenómica allí­", afirmó. El investigador conformó un equipo para lidiar con Clopidogrel, un anticoagulante, inhibidor de la agregación de trombocitos, que se utiliza con frecuencia después de angioplastias coronarias, entre otras enfermedades. En este grupo de pacientes, alrededor de un cuarto son resistentes al Clopidogrel, esto significa que estas personas no pueden beneficiarse de este tratamiento y por lo tanto el riesgo de un infarto, un accidente cerebrovascular y otras enfermedades es alto.

El paciente solo puede beneficiarse de esta tecnologí­a si sus datos genómicos están disponibles y se utilizan. Si el médico prescribe Clopidogrel y lo introduce en el archivo electrónico del paciente, el programa comprueba si este paciente tení­a pruebas genéticas realizadas en tiempo real. Si este análisis muestra que el paciente es resistente a Clopidogrel, entonces esta información se muestra en la pantalla del médico. El software entonces sugiere una medicación alternativa.

En palabras de Bí¶ttinger, las soluciones que mejorarán la atención sanitaria serán integrales basadas en la nube que pueden atravesar todos los sectores para integrar los datos, siendo estos administrados incluso por los propios pacientes. En comparación con la infraestructura oficial de la telemática, esto ahorrarí­a costos, mejorarí­a la calidad de la atención, permitirí­a que el cuidado esté orientado al usuario y, en última instancia, ofrecerí­a al paciente más comodidad y conveniencia.

En la misma dirección, el empoderamiento del paciente en uno de los objetivos de la compañí­a alemana Xbirds. El protagonista de la Cumbre de la Salud Electrónica en el FORO MEDICA HEALTH IT del año pasado, se ha fijado como meta que para el 2020, puedan salvar un millón de vidas mediante el uso de grandes datos y la inteligencia artificial. La aplicación que han desarrollado recoge todos los datos disponibles de teléfonos inteligentes u otros dispositivos finales, tales como wearables, fitness trackers y relojes inteligentes.

La lectura y recopilación de datos vitales de funciones y movimientos pueden compararse con parámetros tí­picos de la ocurrencia de ciertos incidentes o sí­ntomas, además que proporcionan consejos sobre si el usuario de la aplicación corre el riesgo de una recaí­da o si su condición puede empeorar. En la actualidad se practican ensayos clí­nicos para comprobar que este concepto sea confiable para los diabéticos.