Un grupo de investigadores liderado por la Universidad de Harvard, explicó en un informe que se necesitarán unos 5 millones de pruebas por día a principios de junio para ofrecer una reapertura social segura y para fines de julio esa cantidad deberá crecer a 20 millones por día para reabrir completamente la economía en Estados Unidos.
Eso está muy lejos de las capacidades de prueba actuales en el país norteamericano, pues el vicepresidente Mike Pence dijo que en Estados Unidos "los laboratorios y hospitales ahora realizan más de 120,000 pruebas por día".
Para reiniciar la economía en agosto, la nación necesita grandes inversiones, particularmente en pruebas de diagnóstico y anticuerpos, con un precio estimado de USD 15 mil millones por mes durante el próximo año, según el informe. Se podrá producir cuando los líderes del Congreso y la administración se acerquena un acuerdo que podría enviar USD 25 mil millones a los laboratorios para ayudar a impulsar las pruebas.
El informe de Harvard exige aumentar la capacidad para evaluar del 2% al 6% la población de aquel país. Los investigadores pidieron una Junta de Pruebas de Pandemia para coordinar las cadenas de suministro y entrega, similar a la Junta de Producción de Guerra de la Segunda Guerra Mundial creada por el presidente Franklin Delano Roosevelt.
La junta incluiría ostensiblemente a miembros de empresas, trabajo, academia y gobierno con autoridad para identificar los elementos de la cadena de suministro necesarios para fabricar, adquirir, escalar y desplegar cualquier elemento relacionado con las pruebas, así como el poder de adquirir materiales y ordenar una producción similar a las autoridades en la Ley de Producción de Defensa.
"En conjunto, la capacidad de prueba de virus existente en el país (usando PCR) probablemente sería suficiente para manejar un orden por encima de los niveles de prueba actuales si estuviera mejor organizada y coordinada con la demanda", según los investigadores.
La Asociación Estadounidense de Química Clínica emitió por su parte una delcaración en respuesta al plan de la Casa Blanca para la reapertura del país, advirtiendo que los laboratorios se enfrentan a una grave escasez de suministros para realizar pruebas COVID-19, incluidos hisopos, medios de transporte viral, reactivos, pipetas y equipo de protección personal .
Esa advertencia se produjo una semana después de que cuatro asociaciones que representaban a los líderes de salud pública de la nación instaron al presidente a "utilizar todas las autoridades existentes para exigir a las corporaciones estadounidenses que amplíen o reorganicen sus líneas de producción para producir suministros de prueba y equipos de protección personal con urgencia".
Los grupos pidieron "fabricación y producción rápidas de suministros y equipos necesarios para las pruebas rápidas de COVID-19 en el punto de atención, incluidos reactivos, kits de punto de atención, medios de transporte viral, suministros de laboratorio y productos relacionados".
"La recolección de muestras ha sido un punto de estrangulamiento para aumentar el rendimiento de las pruebas en los Estados Unidos, en parte debido a la escasez de hisopos de los dos fabricantes (Copán, Puritan)", según el informe de Harvard. "Solo se están produciendo aproximadamente 6 millones por semana de hisopos nasales y eso debe aumentar significativamente para cumplir con los objetivos de las pruebas", indica el informe.